Aylan

Se va ensoñeciendo la tarde y como tantos días, te espero….
No me dejó impasible la imagen de ese bebé kurdo con tres años tendido en la orilla. Espero que la marea llevara su alma con el señor de todas las fuerzas. Chirriaba esa imagen en mi mente y en mi corazón de tanta impactante dureza para el “MUNDO”,  tan indefenso como solo ante la inmensidad de las olas…entonces volviste tu. Esa amaneciente claridad secuestraba su aliento para siempre. La brisa que debiera acariciar su piel, se llevaba su corta edad, en un frío sin sentido como todas las muertes tempranas e inesperadas.
imageEl mar de amores era entonces mar de dolor y yo sabía que antes de terminar el día podría dedicarle unas palabras para aupar todo lo que pudo ser y no fue más que muerte. No carece esta señal de valor, la humanidad tiene que saber sacar conclusiones y de algo estéril hacer virtud. No pueden morir inocentes así y este es uno de los que nos deben hacer abrir los ojos. Como el pequeño “Aylán” mueren a diario muchos niños, unos de hambre otros de enfermedad o del sufrimiento causado por asesinos y no detenemos el mundo, siendo mucho más de lo que nos muestran.. No, ni siquiera parar para pensar, sentir o llorar…
Tras cada minuto volvía esa imagen que no quiero reproducir por respeto a la infancia y prefiero evocarte mientras te cuento mi sentir sobre todo esto, como sí estuvieras aquí y no en Madrid con tus exámenes.
Prefiero combatir el dolor con tu amor, ya sabes que siempre digo que es la única fuerza que vence a la muerte. Por eso quiero inspirar amor para este desconocido pequeño al que no sabemos quienes llorarán, quienes le rezaran o quienes lo utilizarán para culpar… ¿a quién? Los inocentes tienen la fuerza de cambiar la sociedad pero yo prefiero la razón a los mártires del siglo XXI

Cierro los ojos para acercarme a ti, para escuchar el murmullo del mar musicando ecos en el aire mientras las caracolas, como vibrantes cornetas llaman al otro lado del mar expresando todo esto a las familias, a los amigos que desconocen este secuestrador golpe del destino.
imageToda la esperanza labrada en esfuerzos por un futuro mejor, todo por llegar a ese fulgor que se desnuda ante los sueños rotos y la frustración. Sólo el orfebre de la luz puede marcar otro camino diferente a la desolación.

Ya ha llegado la noche y al amanecer volverá a encenderse la brisa con el dorado fuego del nuevo día. Sólo los recuerdos de amor podrán abrir un hueco a la AUSENCA!!!

Por el pequeño una oración y una más por cada uno de los que al día siguiente no pueden volver a ver la luz, sino en los que permanecen vivos.

Mi querida hija, siempre te espero.

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